Crónica remitida por la redacción de la Asociación Cultural y Peña Flamenca ‘Ciudad de Motril’, de la actuación del otiveño Julio Fajardo en el ciclo ‘Flamencos de la Tierra’.
Dentro del ciclo “Flamencos de la Tierra”, la Asociación Cultural y Peña Flamenca ‘Ciudad de Motril’, realizó otro acto digno para buenos aficionados, siendo también oferta y plataforma turística de todas las posibilidades que ofrece nuestra ciudad. Como ya es costumbre la cita era en la Sala Flamenco Katena, a partir de las nueve y media de la noche.
Abría este nuevo ciclo el conocido artista Julio Fajardo. Julio nace en Otivar, a los pies de la Sierra de la Almijara y Cázulas, desde niño escucha en su casa flamenco por parte de su padre, abuelo y hermanos y de ahí su afición a este bello arte. Ha grabado tres trabajos discográficos como son el CD. Homenaje a García Lorca y Miguel Hernández. 2.012, CD. Libro del Poeta Granadino José Ganivet 2.013 y CD. Libro Antología del Fandango Con Alfredo Arrebola 2.015
Algunas de las distinciones más reconocidas de Julio son: el 1º Premio XLI Concurso Nacional Serranas Prado del Rey (Cádiz), agosto 2.016; 1º Premio IV Concurso Federación Peñas Granadinas (Granada), enero 2016; 1º Premio Concurso Saetas Virgen La Soledad Moriles (Córdoba), marzo 2.014; Premio Especial a la mejor Malagueña del Canario, julio 2.017; en el XXVII Concurso Colmenar (Málaga), Premio Especial Mejor Cante por Serranas, abril 2.015; XXXI Concurso Adamuz (Córdoba), III Concurso Federación De Peñas Granadinas (Granada), enero 2.015; y así, una larga lista de premios especiales y generales de los eventos por los que ha ido derramando su arte.
En una gélida noche de viernes, el cantaor venía acompañado por la guitarra de Miguel Ángel Martín, joven motrileño que está demostrando la gran proyección que atesora y llevando a gala la grabación de su último trabajo, ‘Llegando a la costa’.
Comenzaba el recital con un agradecimiento por la invitación a la Peña Flamenca con unas palabras acogedoras que empezaron a caldear la fría noche, “tenía ganas de venir a cantar a una peña con tanto arte y tanta pureza”, así como al respetable y silencioso público asistente. Abría el bahúl de las esencias siguiendo la ortodoxia, como se escucha entre los aficionados “diciendo bien los cantes”; rompía la noche por soleá, se paseó por malagueñas, por granaínas, hizo cantes de levante, de ida y vuelta, farruca…; daba por concluido su amplio recital por seguiriyas. Se sintió a gusto, arropado por respetuosos aficionados y público, pero sobre todo querido. Julio Fajardo es un claro ejemplo de los buenos cantaores que ha dado y está dando la zona, mantiene la llama viva para la perpetuidad de este arte y puede llevar a gala el ser un buen cantaor y aficionado, pero por supuesto mejor persona.
Como en cualquier peña, la noche se alargaba para disfrute de todos los presentes con un corro de aficionados que hicieron un par de rondas de buenos cantes por todos los palos, Julio se tiró unos fandangos y alegrías de arte, Perico Sevilla sus fandangos y cuplés por bulería, José Maldonado por tangos, Paco Maldonado haciendo soniquete y unos solos de guitarra de Miguel Ángel Martín dignos de concierto, todo “arrebujao” con unos buenos vinos y a la vera de la chimenea que ardía desde primeras horas de la noche. Otra velada más para sumar a la historia del Flamenco de nuestro Motril.
Por su parte, la Peña Ciudad de Motril ya está rematando la ‘II Navidad Flamenca’ y en breve saldrá a la luz su cartel; la misma se realizará en la Nave de los Arcos de Motril en la noche del 22 de diciembre a partir de las nueve de la noche.